Deseos...

Cuando caminamos por las calles, te deseo, cuando te encuentro entre las puertas de tu casa, te deseo. Cuando me tomas de las manos, te deseo, cuando por accidente tu cuerpo se aproxima al mio te deseo. Cuando en la ducha he visto tu cuerpo desnudo, te deseo, cuando veo tus labios susurrar despacio mi nombre, te deseo. Cuando tus manos acarician alguna parte de mi cuerpo te deseo, cuando tus ojos se buscan con los mios, te deseo. Cuando tus palabras atraviesan mis oidos, te deseo, cuando con inquietud buscas mis oidos y exhalas tus palabras, te deseo. Cuando a media desnudes te imagino, te deseo. Cuando rompes tu inocencia y con deseo tu me miras, te deseo. Cuando en mis sueños, sin querer, yo te encuentro, te deseo...Te deseo en las mañanas, en mis letras, en las noches que hace frio, te deseo de todas formas, en todos lados...Te deseo, y con mis ojos, suavemente te lo digo, te deseo y con mis manos en tu cuerpo, te lo digo...

Una lámpara...

A un costado una pequeña mesa. Sobre la mesa, descansa, una lámpara que con su leve luz envuelve tu figura, y la mia. Entre sombras nos desdibujamos, así como nos hemos desdibujado a lo largo de los años que hemos pasado "amandonos". Nuestro amor es como la lámpara sobre la mesa que está a un costado, Ya hace mucho que su luz sucumbió ante la mayoria de sombras y se pierde en la espesa negrura que envuelve las pequeñas cosas. De alguna manera, así como el pequeño haz de luz, que nos envuelve, así ambos estamos esperando que los residuos de amor que aún destellamos, nos mantengan al menos durmiendo en la misma cama y compartiendo entre la luz y la sombra, lo que nos queda de vida. A un lado una pequeña mesa, sobre la mesa descansa una lámpara, que con una leve luz y un leve destello de amor, intenta reflejar dos siluetas....

A media luz...

Tras de ambos se cierra la puerta, se acaba el encuentro casual, y comienza nuestra aventura de amor. El ruido del exterior nos recuerda que fuera de estas cuatro paredes no existimos. Pero acá dentro, para nosotros, este espacio es infinito. Tu silueta se dibuja magicamente bajo la luz tenue. Nos estorba la ropa y también la moralidad de la gente. A media luz nuestros cuerpos se encuentran y te desnudas con mis manos, mientras yo lo hago con las tuyas. A media luz se nos deshacen las bocas y nuestros sexos se besan. A media luz y tan cercana a mi encuentras mi cuerpo, me recorres despacio, mientras por dentro me comes a prisas. Te tomo toda, sin dejar nada para después, te tomo y te creo, con mis manos moldeo cada línea de tu cuerpo, con mis ojos moldeo las líneas de tu alma. Y a media luz nos amamos, nos entregamos uno al otro, a la pasión que nuestros cuerpos exhalan, a las ganas, al deseo, nos entregamos a hacer el amor...

Carta...

Amor,

Te escribo éstas líneas porque no tengo la fuerza de verte a los ojos y decirte que me marcho, ha sido díficil tomar esta decisión, pero no puedo más, te tengo atrapada en la garganta y no puedo hablarte, se me han llenado los pulmones de distancia y me cuesta respirarte, la sangre me pesa, como pesa el olvido, y por eso no circulas mas en mis venas, hace tiempo que deje de sentirte y es por eso que mi piel no busca el contacto de la tuya, ni los abrazos, ni las caricias. La llama que se apago entre vos y yo, ha terminado por volverme ciego, y entonces perdí los caminos que me llevan a ti, y comencé a dirigirme en dirección contraria, los oidos se me llenaron de excusas, tuyas y mias, tanto así que deje de escuchar hasta mi voz, y entonces no te entendia, ciego para no ver, sordo para no oir, y ni tan siquiera te podia sentir. Desde entonces los pensamientos se pusieron en huelga y deje automaticamente de pensarte, se me vino a la mente la idea de irme y con esa idea vinieron las acciones...

Amor, lo siento...

Entre aleteos...

Una extraña sensación me recorria la espina dorsal, y se adentraba y me latia en el corazón a paso fuerte, me corria por las venas adentrandose hasta lo más recondito de mi ser, me calaba hasta los huesos, y me inundaba el cerebro, constantemente, nublandome la razón con su leve pero profundo caminar...Dice una frase: "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo"*, como nose ha de sentir cuando el aleteo es en tu interior, cuando ese manto incesante de alas se agita, también se agita el corazón, lo has notado, y has visto que las pupilas se dilatan y mi respiración se entrecorta con tu sola presencia...Y es que entonces comprendí que estaba ya en mi, que sin darme cuenta me habia enamorado de ti, y que siempre lo he estado, y que quiero con todo el corazón seguir enamorado. Me di cuenta cuando un día sin pensarlo me plantaste un beso, y me lo guarde en el corazón entre aleteos de mariposas...

*La teoria del caos